Teníamos esperanza y expectativa de la reunión de la Asamblea General de la OEA en la ciudad mexicana de Cancún porque se iba a tratar de la situación gravísima que vive el pueblo de Venezuela, es algo que no desearíamos a ningún pueblo de la tierra, donde se masacra, reprime y asesina cada día por parte de los grupos armados del gobierno, utilizando a la Guardia Nacional y a los colectivos armados . ¡Que pena!, pueblo asesinando a pueblo, sin respetar los DD.HH. de estos valientes jóvenes y población en general que día a día se arriesgan a perder su vida para salvar a su patria .Esta represión al pueblo se da porque defienden a un grupo que quiere perennizarse en el poder, al estilo cubano y defender la doctrina del mal llamado Socialismo del Siglo XXI. Todos los gobiernos que proclaman esta doctrina han saqueado los recursos de los países donde han actuado.
Como ecuatoriano siento vergüenza ajena de nuestra delegación diplomática a esta Asamblea por la sencilla razón de que siguen respaldando a un gobierno fascista, comunista y no a un pueblo que se desangra y sufre cada día, la esperanza que tengo es que pronto veremos el resurgir de esa gran patria de Bolívar y la historia los juzgara a todos aquellos gobiernos, incluido el nuestro, que respaldaron al gobierno sanguinario de Venezuela.