La actual terminal está rodeada de áreas verdes con plantaciones de banano y otros. Foto: Enrique Pesantes/EL COMERCIO
El José Joaquín de Olmedo de Guayaquil aparece en el ‘Top 100’ de los mejores aeropuertos del mundo en el 2017. Está en el puesto 66 (65 en el 2016) de los Premios Skytrax World Airport Awards.
El ranking se hizo a través de una encuesta en 550 terminales -julio 2016 a febrero 2017- entre 13,8 millones de viajeros.
En esa escala mundial solo están tres terminales de Sudamérica: Bogotá (42), Quito (52) y Lima (55), en ese orden, y por encima del aeropuerto porteño, José Joaquín de Olmedo.
Desde el 2007, el aeropuerto ha recibido 47 galardones regionales y a escala mundial en diferentes categorías como en la de 2 millones hasta 5 millones de pasajeros anuales.
Según Nicolás Romero Sangster, gerente de la Autoridad Aeroportuaria de Guayaquil (AAG), la actual terminal todavía no tiene problemas de saturación y el crecimiento de pasajeros está en los niveles previstos. Sin embargo, ya trabajan en los estudios para convocar al concurso internacional para la nueva terminal en la zona de Daular, que deberá operar en el 2024.
En el primer semestre de este año el número de pasajeros internacionales creció un 5%, en relación con el mismo período del año anterior. El promedio de crecimiento de la región es de 4%.
Pero si bien los viajeros internacionales aumentaron de 1,7 millones en el 2015 a 1,9 millones el 2016, los turistas nacionales han descendido. Pasaron de 1,9 millones a 1,8 millones, según los datos de la AAG. Las autoridades atribuyen la caída a la crisis económica del país.
La empresa Terminal Aeroportuaria de Guayaquil SA (Tagsa) tiene contrato de operación hasta julio del 2024. Romero dice que la administración privada ha sido eficiente.
Para la concesión de Daular también se buscará una empresa privada que diseñe, financie y opere la terminal. Hasta ahora han mostrado interés grupos de Francia, Alemania y China, según Romero.
La concesión con Tagsa se firmó en el 2004 e inmediatamente comenzó a operar la antigua terminal Simón Bolívar. Ese año se instalaron las primeras tres mangas para Guayaquil, actualmente hay 10 y en el nuevo habrá entre 18 y 21.
La terminal José Joaquín de Olmedo se inauguró en el 2006 y hoy circulan por ahí 3,7 millones de pasajeros.
La empresa Tagsa tiene 410 empleados que se suman a los 6 000 que laboran en los 35 locales comerciales (restaurantes, agencias de viajes, etc.) y demás compañías que prestan servicio en el aeropuerto.
Según AAG, por Guayaquil operan actualmente tres aerolíneas en frecuencias nacionales y nueve en internacionales.
La terminal funciona como una pequeña ciudad. Tiene su propia subestación eléctrica y un incinerador de desechos sólidos de vuelos internacionales. Para el resto de actividades opera un carro recolector de desechos y zona de reciclaje. También, cuenta con una planta de tratamiento de aguas servidas y estación de bomberos y atención médica.
Tagsa entrega al Cabildo el 50,25% de los ingresos brutos y tasas reguladas, de acuerdo con el contrato. Los fondos se depositan en un fideicomiso y han servido para financiar el desarrollo de Daular. En el 2016 el canon que pagó fue de alrededor de USD 29 millones.
El futuro del Olmedo
La ‘nueva Guayaquil’ es el megaproyecto urbanístico y de áreas verdes que se planea en el 2024 en las 200 hectáreas que dejará el actual aeropuerto José Joaquín de Olmedo cuando deje de funcionar.
Ese terreno está rodeado por dos de las avenidas más congestionadas de la ciudad: De las Américas y Pedro Menéndez Gilbert. Esta última conecta con los puentes de la Unidad Nacional en el ingreso a Guayaquil. Las dos vías llevan hacia la terminal terrestre, que se ubica en la zona norte del actual aeropuerto.
En una parte de los predios ya funciona el Centro de Convenciones de la ciudad, en el edificio de la antigua terminal Simón Bolívar, en la avenida De las Américas.
Los planes del Municipio son desarrollar una zona industrial, comercial, inmobiliaria, turística; además, un gran parque con lagunas. En los terrenos también se ubicará un helipuerto que servirá para desde ahí atender cualquier emergencia en Guayaquil.
Los estudios, planificación y diseño del proyecto están a cargo de la firma Asoplan. Lo integran la estadounidense Perkins Eastman Architects y las nacionales Metros Cuadrados y la consultora Vera & Asociados. El diseño final del plan se entregará al Cabildo en diciembre próximo.
“Básicamente se proyectan parques, lagunas, vías alternativas que van a cruzar desde la Menéndez Gilbert a la avenida De las Américas, servicios, centros culturales, edificios residenciales”. Eso indicó el alcalde Jaime Nebot que el 18 de julio conoció parte de los estudios de Perkins.
Ricardo Sandoya, de la Facultad de Arquitectura de la U. Católica de Guayaquil, cree que en la planificación el Municipio deberá contemplar un orquideario y un acuario.
En la última década se edificaron hoteles en la zona del aeropuerto como el Holiday Inn, junto a la terminal aérea, y el Sonesta, en la ‘gran manzana’ aledaña al centro comercial Mall del Sol. Además, de otros de menor tamaño.
José Luis Valero, gerente general del proyecto Sky Bulding, edificio que se ubica a un costado del aeropuerto, cree que el nuevo proyecto generará una alta expectativa en el sector inmobiliario.
Valero detalló que se replicará al proyecto Costa del Este en la Ciudad de Panamá. Esa es una zona exclusiva que concentra departamentos y edificios corporativos.